Organizar las comuniones de los peques de la casa puede ser más complejo de lo que parece a simple vista. Te describimos las cinco fases básicas en la planificación de uno de los días más especiales de tus hijos.

El lugar del banquete

¿Os apetece algo más formal, en un restaurante, o algo más informal en el jardín de casa? Hay que tener en cuenta el presupuesto y que en casa es más común que acudan amigos de los niños. Mientras, en un restaurante el ambiente es más familiar.

Las invitaciones

Preparad las invitaciones con la antelación suficiente. Escoged el modelo que más os guste a todos (¡sobre todo al niño, es su día!) e incluid la información básica. Es importante dejar al pequeño decidir.

Decoración

Una fiesta temática es una opción muy original e interesante que, seguramente, les encantará a los peques de la casa. Buscad el tema que más os guste y buscad globos, juegos, serpentinas, tartas y regalos para los invitados relacionados con el tema. ¡Si organizáis una fiesta pirata, por ejemplo, puede ser muy divertido entregar a todos los invitados un parche!

Menú

Se trata de un evento no extremadamente informal, por lo que una oferta de carne o pescado para los adultos es suficiente. Piensa en incluir menús infantiles para los niños y niñas para que todos podáis disfrutar del día. No olvides las chuches o dulces para regalar después.

Lista de regalos

Hacer una lista de regalos hará que a los invitados les sea más fácil decidir su presente y que los niños se queden muy satisfechos con todo. Si se hace en las bodas, ¿por qué no en una comunión?

Intenta planificar las comuniones de tus niños con antelación. Piensa en todos los detalles y ten en cuenta la opinión de tu hijo. Al fin y al cabo, es su día especial. ¡Verás cómo todo sale genial!